Innegablemente, uno de los propósitos de año nuevo más frecuentes en hombres y mujeres es bajar de peso, y cómo no, pues no sólo se trata de una meta que nos imponemos durante los 365 días de cada ciclo, sino que además se vuelve un reto personal tras los grandes banquetes de las festividades decembrinas en los que nos dimos mayores licencias para comer y beber de todo.
Sin embargo, aún cuando este propósito está presente en alrededor del 40 por ciento de todas las listas para dar comienzo el año y esta situación se refleja en un incremento de hasta un 200 por ciento de suscriptores a gimnasios durante el mes de enero, lo cierto es que la mayoría de las personas abandonan esta ambición en la segunda semana de febrero.
Si bien las causas –o excusas— son variadas, y van desde la distancia entre el gym y el hogar, o el choque de horarios con el trabajo, los hijos y diversas responsabilidades, lo cierto es que todas ellas se pueden resumir en dos palabras: impaciencia e inconstancia.
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Y es que los resultados no se dan de la noche a la mañana, sobre todo si consideramos que luego de diciembre los mexicanos subimos en promedio entre 4 y 8 kilogramos, condición que agrava la situación de exceso de peso en aquellos que ya tenían problema con esto.
Afortunadamente, existen nuevas tecnologías a las que podemos recurrir para darnos una ayudadita y conseguir más rápido nuestra meta de deshacernos de esa grasa de más y lucir espectaculares. Aquí te decimos tres de ellas:
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